El Gijón Basket 2015 ha anunciado en la mañana de hoy una nueva renovación. Tras hacer oficial la prolongación de contrato del base Iago Fernández en la jornada de ayer, hoy es el turno de Antonio Pérez-Campoamor, hijo del legendario jugador de mismo nombre que destacó a finales de los 80 y principios de los 90 en equipos como CB Oviedo, Gijón Baloncesto, Basketmar Coruña, además de jugar en la Liga ACB en Cajacanarias y Fórum Filatélico.

“Tona” (Oviedo; 11-09-1995), como es conocido en el mundo del basket, es un alero de 24 años y 1,97 metros que se formó en la cantera de un histórico del baloncesto asturiano como es el Colegio San Ignacio de Oviedo. Posteriormente y ya en edad junior, fichó por el Oviedo Baloncesto donde jugó en categorías como 1ª Autonómica, 1ª Nacional y Liga EBA, con el paréntesis que se tomó al ir como Erasmus a estudiar en la localidad polaca de Cracovia, donde también pudo jugar al basket.

El alero carbayón debutó en la Liga EBA en las filas del filial del Liberbank Oviedo Baloncesto en la temporada 2018-19 con unos promedios de 3,6 puntos, 4 rebotes y 2,9 de valoración en 25 partidos jugados.

El verano pasado se produjo su fichaje por el Noxtrum Gijón Basket, con el que llegó a disputar 19 encuentros la pasada campaña, acreditando 3,3 puntos, 3,2 rebotes y 3,7 de valoración. Sus porcentajes de tiro fueron 44,8% en tiros de campo y 60% en tiros libres.

Pese a no tener unos números demasiado llamativos, la importancia de “Tona” llega desde los muchos intangibles que aporta. Jugador siempre identificado con su equipo, jamás escatima esfuerzos y pone todo de su parte para aportar su granito de arena, destacando especialmente en el rebote y en la defensa.

(Noticia: F. Gayo)